LOS MICROORGANISMOS CON SUPERPODERES
Los microorganismos regeneradores y fermentativos que defendemos desde la Nutrición Simbiótica impiden la proliferación de los microorganismos de la putrefacción y la descomposición, generando y perpetuando la vida del medio en el que se encuentran. Con esta afirmación, hacemos entender que la relación mantenida con estas especies será de simbiosis y mutualismo. Podemos resaltar algunas familias de microorganismos presentes en la fermentación:
• Bacterias ácido lácticas: generan sustancias fungicidas y bactericidas de amplio espectro (ej. bacteriocinas). Las propiedades del ácido láctico permiten acelerar la degradación de la materia orgánica persistente, como la lignina y la celulosa, facilitando la digestibilidad de los vegetales. Además actúan como conservantes naturales impidiendo la proliferación de otros microorganismos no deseados y evitando la putrefacción de los alimentos.
Ej. del género Estreptococos y Lactobacillus
• Levaduras: son hongos microscópicos unicelulares capaces de descomponer la materia orgánica, principalmente los hidratos de carbono, y secretar sustancias bio-activas (antioxidantes, vitaminas, enzimas y hormonas) que favorecen el metabolismo celular, protegen del daño oxidativo y nutren el organismo. Además, generan sustratos beneficiosos para la actividad de las bacterias ácido lácticas. Convierten fácilmente los hidratos de carbono en alcohol y CO2 generando productos alcohólicos y/o carbonatados.
Ej. del género Sacharomyces.
• Bacterias fotosintéticas: poseen bacterioclorofilas y carotenoides, y pueden clasificarse en 3 grupos: las verdes, las púrpuras y las cianobacterias. Dependiendo del género, son capaces de utilizar compuestos orgánicos e inorgánicos para sintetizar ácidos nucleicos, aminoácidos, sustancias bioactivas y azúcares, favoreciendo la proliferación del resto de microorganismos. Una forma fácil de incluirlas en la fermentación es añadiendo agua de mar, de ríos o algas.
• Hongos fermentativos: son capaces de descomponer rápidamente la materia orgánica, produciendo ésteres, alcohol y sustancias antimicrobianas.
Ej. del género Penicilllium, Rhizopus y Asperguillus.