Kombucha: elixir de la eterna juventud.
Actualmente se está volviendo a emplear productos de la naturaleza para curar enfermedades. Esto entraña un riesgo y es el no saber emplearlos en su justa medida. Mi consejo es utilizarlos con prudencia y no abusar de ellos, sin ver su efecto en nuestro organismo, sabiendo que no todos los productos actúan igual en todas las personas.
El té de kombucha ya se consumía en China 2500 años antes de Cristo. Pero parece ser que la persona que lo descubrió años antes fue un Coreano.
El té Kombucha llamado de varias formas , no es un hongo sino una simbiosis de levaduras y otros microorganismos, y tiene un aspecto gelatinoso.
El kéfir de té o kombucha es diferente al resto de los kéfir, tanto en preparación como en propiedades.
El té de kombucha se consigue preparando previamente una tisana generalmente con té negro, (aunque también se puede preparar con otros tipos de té como el verde etc.) endulzado. Después en esta tisana se fermenta una colonia de microorganismos , que se llama «colonia kombucha» Compuesta por cepas de Bacteriun xylinum y levaduras.
Esta bebida al igual que los otros tipos de kéfir, se han puesto de moda a partir de la difusión de sus propiedades curativas. Y a diferencia de los otros tipos de kéfir si se puede comercializar embotellado. De hecho ya se puede encontrar en muchos herbolarios y con distintos tipos de componentes en su elaboración. Pero por lo que sé, no se puede comparar al que podemos preparar en casa.
A diferencia del kéfir de leche ó del kéfir de agua los cuales aparecieron de una manera espontanea, el kéfir de té ó kombucha para que se produjera tuvo que intervenir la mano del hombre, ya sea intencionadamente ó como resultado de una casualidad.
Se sabe como producir una madre kombucha en casa ,mezclando los ingredientes apropiados ,y en unas proporciones determinadas.
Un dato muy importante a tener en cuenta cuando se prepara té de kombucha. Es que a diferencia de los otros tipos de kéfir, al de té le puede aparecer MOHO. El moho puede ser peligroso. Esto puede aparecer por la falta de higiene, pero también a pesar de ella. Lo que sucede con frecuencia es que las esporas del moho son aerotransportadas y contaminan nuestra kombucha.
Hay una forma de impedir que esto ocurra , consiste en hacer nuestro preparado más ácido. Cuando preparemos la primera tanda lo haremos con una duración de al menos 15 ó 20 días. Y en las futuras tandas emplear como arrancador liquido de esta primera fermentación, ó también añadiendo al arrancador unas cucharaditas de vinagre destilado. Lo más sencillo es emplear un arrancador más ácido de nuestra primera tanda. En un medio muy ácido el moho no puede desarrollase.
El color del bebe de kombucha si está de color más claro , no significa que tenga moho. Si tenemos duda sobre ello, lo mejor es esperar unos días y si aparece como una pelusilla en la superficie entonces sí podemos pensar que es moho, y lo mejor es deshacernos de esta kombucha y conseguir otra, para empezar de nuevo el cultivo.
Un a vez que le pongamos nuestro arrancador ácido, el tiempo de fermentación puede ser más corto desde 7 ú 8 días en verano, hasta 10 ó 12 días en invierno, dependiendo de nuestro gusto, si nos gusta más dulce menos días ó más días para conseguirlo más ácido.
Una preparación de té de kombucha preparado correctamente no tiene porqué dar ningún problema.